Zurciendo el planetaEste modelo me lo enseñó Miki Takenaka, una amiga japonesa, y lo maravilloso que tiene es que es super fácil de hacer (no tiene cierres y es de pura costura en linea recta) y muy adaptable a cubiertos de diferentes tallas según la necesidad, desde lonchera escolar a picnic elaborado!
El proyecto de este blog empezó con la idea de aprovechar nuestro gusto por la costura y la creación para re-aprovechar telas viejas. Aunque uno agujeree su pantalón en la rodilla o un suéter en el codo ¡el resto de la tela está casi nueva!! Podemos remendar. O podemos transformar. ¿Qué hacemos con ella?
Empezamos mis amigas y yo, de muy lejos y de aquí en México, platicando ideas de cómo transformar una cosa vieja en una cosa nueva.
¿Se acuerdan de una escena en La Novicia Rebelde donde todos los niños están trepados a los arboles vestidos con ropa de juego hecha por María de las cortinas viejas que el Capitán había mandado cambiar (y tirar)? Vienen llegando a su casa en un bote cuando los ve él y está horrorizado al pensar que sus niños estuvieron paseando en público vestidos de cortinas. ¿Pero cual es el problema??
Vista hacia el volcán desde el bosque[/caption]
Dicen los pobladores de Nuevo San Juan Parangaricutiro que “paricutín” no significa nada en purépecha.
El 20 de febrero de 1943 Don Dionisio Pulido, un comunero de San Juan de las Colchas, como se le conocía a San Juan Parangaricutiro por su producción textil, salió a revisar su milpa. Se sorprendió al descubrir una grieta en la tierra plana de su milpa que echaba gases y calor. Al día siguiente se veía rojo vivo en la grieta, y pronto empezó a levantarse la tierra alrededor de la grieta. En un año, la pequeña grieta, ya era un cerro ardiente de 400m de altura sobre la meseta purhepecha.
Ya sabemos lo bien que nos hace estar afuera. ¿Pero cómo salir a espacios verdes en CDMX? Los parques pueden ser, pero están asfaltados, sus caminos delineados y no hay espacios para que los niños escarben la tierra y descubran bichos sin peligro de toparse con un popó de perro.
Pero sí hay lugares a los que puedes llevar una manta y un picnic y pasar una tarde a la sombra de un árbol mientras los niños se trepan a los árboles, construyen casitas de palitos o patean una pelota.
Aquí va una lista de algunos que conozco o de los que me han hablado. [Esta entrada sigue en construcción continua con nuevos descubrimientos de espacios verdes.]
(Al final del artículo hay un enlace con ideas de re-conexión con la naturaleza en el contexto de la Megalópolis que es CDMX o planeen un viajecito para el próximo fin de semana largo.)
La idea que debemos conquistar o dominar la naturaleza ha dirigido el comportamiento humano por un periodo relativamente corto de nuestra historia de 150 mil años en este planeta de 4.5 billones de años. Es un impulso comprensible. Nuestra inteligencia y capacidad de previsión nos permitieron desarrollar sociedades complejas y nos dieron una sensación de control sobre nuestra existencia frente a la fuerza de la poderosa, y a veces amenazante, naturaleza.
Como muchos ya sabrán, el mar está lleno de plástico.
En varios casos cuando han hecho autopsias de ballenas encalladas, les encuentran pedazos grandes de plástico grandes en el estomago. No las pueden digerir, pero obstruyen su sistema digestivo y hay que suponer que las hacen sentirse mal, aunque hasta ahora no han podido decir definitivamente si esa es la causa de su muerte, pero tiene que ser un factor que las debilita. Esta ballena de Cuvier, encontrada en Noruega a principios de este año, claramente murió por no poder comer.
También se sabe que los albatros han sufrido muchas bajas por comerse plástico indigestible que les llena la panza y no les deja comer, como en Midway Atholl. En estos días la embarcación Beluga II de Greenpeace anda por aguas del Atlántico Norte, registrando la presencia de plasticos. Y resulta que la botellas de plastico, sus tapas y sus pedazos (porque finalmente se rompen) son de los peores contaminantes.
El productor más grande de botellas de plástico es la Coca Cola y no se quiere hacer responsable de las consecuencias de tanto plástico producido. Digo ¿Cual es el problema con regresar a las botellas de vidrio retornables? Si hace 30 años podíamos devolverlas, también podríamos hacerlo ahora. Y tendríamos todos un incentivo para devolverlas en lugar de dejarlas tiradas.
Para presionar a la Coca Cola, Greenpeace ha iniciado una campaña muy sencilla. Cada vez que veas una botella de Coca Cola tirada donde no debe estar, tómale foto y compártela en redes sociales:
En Instagram con los tags tag @cocacola or @cocacolaEU. Para aumentar la posibilidad de que Coca Cola vea tu contribución puedes agregar los hashtags #EndOceanPlastics, #ShareACoke, #CokeSummer o #TasteTheFeeling
En Facebook sube tu foto con el tag @CocaCola. O entra a la página de la Coca Cola y comenta con tu foto uno de sus posts recientes.
Aunque la veas tirada muy lejos del mar, en la Ciudad de México está claro que todo lo que termina en el drenaje, se va al drenaje profundo, sale al río Tula y de ahí no hay nada que detenga las botellas flotantes en su camino al mar.
¡¡Estaría genial que lo hiciéramos muchos y les llenaremos a la Coca Cola de fotos de su basura internacional!!
¿Todos y todas ya saben coser un botón? No importa lo que no supiste hasta ahora. Hoy vamos a ver cómo coser un botón.
Una lombricomposta es una manera muy sencilla de reducir nuestra contribución a los basureros municipales, al reciclar desechos de la comida y transformarlos en abono que podemos usar en el jardín o en macetas. Aunque abunden mitos que digan lo contrario, la lombricomposta es muy sencilla de cuidar, pueden tenerla en un interior (perfecto para un salón escolar o un departamento pequeño) y mientras cuiden lo que les den de comer, no debería haber ningún problema con los malos olores!