¿Te acuerdas de esa vez que echaste un sweater a la lavadora con agua caliente y salió reducido a tal tamaño que no le queda ni al bebé? Eso es fieltrar. Así que si ya lo hiciste sin querer, no tires la prenda: aun tiene uso.
Al encontrarse en agua caliente con jabón y mucho movimiento, la lana se apelmaza (como los dreadlocks más o menos) y se encoge. Lo cual puede ser muy frustrante si tenías la intención se seguir usando ese sweater, pero por otro lado tiene muchos usos diferentes.
El tejido se vuelve mucho más denso y por ende resistente y calentito y se puede cortar de cualquier manera y ya no se destejerá.
Algunas recomendaciones para fieltrar un sweater viejo a propósito:
- Junta varios sweateres para tener un complemento completo para la lavadora. Nunca conviene prenderla si no está llena pero además es más práctico fieltrar varios sweateres a la vez.
- Pon cada pieza a fieltrar en una funda de almohada y sujeta con una liga para el pelo. Al fieltrarse, la lana puede soltar muchas bolitas y fibras, y es mucho más sencillos vaciar tus fundas luego que estar recogiendo bolitas y fibras del fondo de la máquina y la ropa de las siguientes lavadas (hablo con experiencia)
- Echa a andar la máquina con agua caliente y el jabón que sueles usar para el lavado normal
- Al terminar el ciclo, tus prendas estarán fieltradas. Puedes tenderlas para que sequen y pensar en el proyecto que harás…
¿Qué hago con el sweater que fieltré?
Guirnaldas decorativas
Cobijas (tutorial proximamente)
Pantuflas (fotos próximamente)
Bolas de lana para el secador
Aunque conviene no usar el secador, porque gasta mucha energía, si en ocasiones no lo puedes evitar, las bolas de lana reducen la estática, aceleran el proceso de secado (por ende ahorran energía) y contribuyen a reducir las arrugas en la ropa). Tutorial próximamente.